Las ansiadas vacaciones han llegado para muchos. Algunos afortunados hace días que las disfrutan. Otros, como yo, deberán esperar algunos días. No en vano, es verano para todos, una época para disfrutar de la calle, las terrazas, la playa y los amigos en toda su esencia.
Vivimos exaltados, sin tiempo para introducir nuevas rutinas. Sin embargo, es el verano una época de alegría y reflexión que nos invita a introducir nuevas costumbres.
Ensaladas, deportes al aire libre y bebidas naturales refrescantes tienen la oportunidad de colarse en nuestras rutinas, sin ser un obligación, tan solo nuevos propósitos que alegran nuestra vida y que deseamos que queden instaurados todo el año.
Te revelo que he introducido varios hábitos para mejorar la calidad de mi descanso y mi vida en general. Mis cenas son ligeras y a la vez nutritivas. Dejo fuera las comidas pesadas que interfieren mi descanso. Ahora duermo con el móvil desconectado y fuera de mi habitación, compré un despertador monísimo de madera con números analógicos en blanco ¡qué me encanta! Así que he vuelto al reloj de mesa como antaño. Una hora antes de acostarme dejo el teléfono, ipad, portátil… lejos de mi alcance sustituyéndolos por una bonita lectura o una película entretenida y positiva.
Estos han sido mis nuevos propósitos de este verano y ojalá perduren por mucho tiempo.
Te animo a que tu también incluyas nuevas rutinas saludables que te permitan mejorar tu calidad de vida y además, ¡me encantaría que me las contaras!